martes, 10 de enero de 2017

No Eres Perfecta


No eres perfecta.

No busco eso en ti, no intentes serlo.

Eres imperfecta en cada cosa.

Eres imperfecta cuando tomas para ti la tortilla que se pasó de tostada en el desayuno, eres imperfecta cuando intentas taparme por las noches sin despertarme, eres imperfecta cuando intentas hacerlo todo para no molestar a los demás.

No eres perfecta, entiéndelo.

Pero entiende también que así imperfecta te amamos. 

Aprende a amarte con la misma devoción con la que la manita de nuestra hija se aferra a ti cuando va a dormir, como si fueras un salvavidas o la muñeca más hermosa del mundo.

Yo aprendí a amarte así, porque sé que no eres perfecta, porque no espero que lo seas, porque para mí si eres la más hermosa, porque para mí si eres un salvavidas, porque tú convertiste a todas las demás mujeres en un difuso e impreciso plural.

Y eso, para mí, es perfecto.

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